Hoy ha sido uno de esos días pesados de mucho trabajo pero sobre todo largos, muy largos; de esos días que te hacen pensar una docena, por no decir un par de docenas de veces, en llegar a casa y no hacer nada, pero lo que es nada de nada.
Sólo quería llegar, apagar el teléfono móvil, coger algo de comida del frigorífico y servirme una copa de vino como Villa Narcisa Rueda Verdejo Blanco 2011, un vino blanco con un marcado paso de fruta madura y un ligero toque amargo. Pero después servirme la copa de vino, me di cuenta que en el frigorífico no había nada que acompañara bien con el vino, y lo peor de todo, que aún teniendo los ingredientes, no tenía ganas de ponerme el delantal y preparar el almuerzo. Definitivamente tenía uno de esos días de no tener ganas de nada, ¿me entiendes, no?
Pues en este punto es donde uno se plantea un dilema: o preparo la comida o pido comida para entregar a domicilio, un difícil dilema, así que me decidí por lo segundo. Me senté delante del ordenador, y en un buscador de Internet escribí “a domicilio Madrid” para buscar alguna web donde pedir comida a domicilio, pero ya que estaba busqué algún restaurante de comida exótica; así que después de escoger un restaurante especializado en comida oriental y hacer el pedido; sólo me tocaba esperar.
PabloD Gourmet 
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